16 preguntas para que hablar sobre el matrimonio sea realmente fácil
Hablar sobre el matrimonio puede dar miedo, pero no romperá el lomo del camello proverbial si lo aborda correctamente. Aquí hay 16 preguntas sobre el matrimonio para plantear.
Es imposible precisar el porcentaje exacto de matrimonios que terminan en divorcio, pero el consenso general tiene un número que ronda el 50%. Esa es una cifra bastante aterradora, y no es algo a lo que hacer la vista gorda.
Según Utah Divorce Orientation, “Las razones más comunes que dan las personas para divorciarse son la falta de compromiso, demasiadas discusiones, infidelidad, casarse demasiado joven, expectativas poco realistas, falta de igualdad en la relación, falta de preparación para el matrimonio y abuso. ”
Entonces, ¿cómo exactamente puedes evitar desviarte hacia la mitad triste de la escala del matrimonio y quedarte en el lado feliz? Supongo que si tuviera la respuesta, ya sería rico. Sin embargo, puedo decirle que discutir ciertas cosas antes de casarse le dará una ventaja para mantener unido su matrimonio. Al hacerlo, al menos abordará los problemas de «demasiadas discusiones, expectativas poco realistas y falta de preparación para el matrimonio» mencionados anteriormente.
Preparación adecuada – Hablar sobre el matrimonio
Siempre es mejor prevenir que lamentar, así que aquí hay 16 cosas realistas para preguntar sobre el matrimonio sin asustar a su futuro cónyuge.
#1 ¿Queremos hijos? Puede que sepas lo que quieres, pero ¿sabes lo que realmente quiere tu pareja? Si comparte puntos de vista opuestos sobre esto, resuélvalo antes de casarse. No querrás estar firmando papeles de divorcio años después, simplemente porque no hablaste de tener pequeños secuaces.
#2 ¿Deberíamos practicar una religión común o un sistema de creencias? Por ejemplo, en Malasia, la ley establece que si te casas con un musulmán, debes convertirte. No solo eso, sino que sus hijos deben ser criados como musulmanes. Esto es injusto, ya que no le da a nadie una opción al respecto, pero si vives en un lugar que te da el lujo de elegir, asegúrate de discutirlo antes de casarte. Tan serio como es el tema de la religión, siempre puedes abordarlo de una manera alegre.
# 3 ¿Deberíamos tener una boda? Te sorprendería la cantidad de personas que no quieren organizar una ceremonia de boda. Gastar todo ese dinero en un evento de un día ya no es tan atractivo como lo era antes. Por ejemplo, mi prometido y yo hemos decidido fugarnos y gastar los miles de dólares que estamos obligados a ahorrar en el pago inicial de una casa.
#4 Si lo hacemos, ¿debería ser grande o pequeño? Si no eres como yo y quieres una ceremonia, habla con tu pareja sobre si quieres organizar algo pequeño e íntimo o grande y vistoso. Saber que están en la misma página le ahorrará muchos problemas en el futuro cercano, además le dará la oportunidad de resolver la situación financiera.
#5 ¿Tenemos seguridad financiera? Hablar de dinero no es agradable, especialmente si no tienes mucho para todos. Siéntese y discuta seriamente con su pareja si ambos son lo suficientemente estables financieramente para casarse. No tiene sentido si ambos están ahogados en préstamos o, peor que eso, desempleados.
#6 ¿Deberíamos abrir una cuenta conjunta? Conozco algunas parejas que han estado casadas durante años, pero no ven la necesidad de abrir una cuenta conjunta. Por otro lado, también conozco parejas que juran por cuentas conjuntas. Tratar con el dinero es un tema personal y subjetivo y algo que solo tú y tu pareja podéis decidir.
#7 ¿Dónde queremos terminar? Esta es una pregunta divertida y que le dará una idea de los objetivos de su pareja. Desde Casablanca hasta Ciudad del Cabo, el mundo es un lugar enorme y si ambos son entusiastas de los viajes y adoran el estilo de vida nómada, descubrir dónde quieren terminar es un tema importante de discusión.
# 8 ¿Está dispuesto a mudarse? Muchas parejas no hablan de esto hasta que realmente enfrentan el problema. A pesar de lo estables que son sus trabajos, puede llegar un día en que necesite mudarse para avanzar en su carrera. Averigua si ambos están dispuestos a mudarse el uno por el otro o si prefieren invertir en una relación a larga distancia.
#9 ¿En qué tipo de hogar vamos a vivir? ¿Casa adosada? ¿Condominio? ¿Casa del árbol? Determinen en qué tipo de hogar se ven y podrán comenzar a trabajar hacia esa meta.
#10 ¿Quién hace qué en casa? Los tiempos han cambiado. Ya no vivimos en una era en la que se espera que las mujeres cocinen y limpien. Compartir las tareas ahora es la norma, y es recomendable que establezca un esquema general de quién va a hacer qué. ¿Odias limpiar el baño? Convence a tu pareja para que se encargue de eso mientras tú te encargas de cocinar.
# 11 El amor no es suficiente. ¿En qué tenemos que trabajar? No es ningún secreto que el amor no es suficiente para mantener viva una relación. Cuanto antes reconozca esto, más probable es que su matrimonio dure. Averigua en qué necesitas trabajar. Ya sea para condimentar el sexo o ser más paciente, inicie su matrimonio sabiendo que es un compromiso de por vida que requiere mucho trabajo.
# 12 ¿Estás seguro de que te quedarás conmigo? Converse con su pareja sobre los posibles escenarios que pueden surgir para desafiar su matrimonio. ¿Se quedará tu novia si te enfermas? ¿Qué pasa con la bancarrota? ¿Infidelidad? No hay necesidad de profundizar demasiado en esta conversación morbosa, pero siempre es bueno saber cuál es la posición de ambos en ciertos temas.
# 13 ¿Podemos aceptar ser leales para siempre? Mucha gente asume que es fácil mantenerse leal en un matrimonio, pero ¿qué pasa en 5 años, 10 años o 20 años? ¿Seguirán las cosas igual cuando el tiempo y la edad te afecten, por dentro y por fuera? Las tentaciones vendrán, y depende de ti decir que no. Háganse una promesa el uno al otro y cúmplanla.
# 14 ¿Siempre NOSOTROS seremos lo primero? Asegúrese de estar en la misma página cuando se trata de lo que viene primero. En caso de que te lo estés preguntando, tu relación debería triunfar sobre todo y cualquier otra cosa. Tu trabajo, dinero y otros asuntos externos no deben competir con el amor de tu vida. Muchos dirán que debes ponerte a ti mismo primero, pero al final del día, cuando decides casarte con alguien, siempre debemos ser NOSOTROS y no YO.
# 15 ¿A qué no estás dispuesto a renunciar y puedo vivir con eso? Antes de caminar por el pasillo, hable sobre lo que ambos están dispuestos o no a renunciar. ¿Odias sus tendencias de acaparamiento? ¿Desprecia su colección de muñecas de porcelana? Hable sobre lo que debe quedarse y desaparecer antes de mudarse juntos.
# 16 ¿Estamos realmente listos? Finalmente, discuta si realmente está listo para casarse. No hay nada de malo en mantener un compromiso prolongado. Mi prometido y yo hemos estado comprometidos por más de un año y medio, y nos encanta. Aunque tenemos que lidiar con preguntas ocasionales de amigos y parientes entrometidos, nos sentimos perfectamente cómodos tomándonos nuestro tiempo. Tienes el lujo de diseñar tu propia relación, así que aprovéchala al máximo.
Solo da el paso cuando estés absolutamente listo. No dejes que nadie te presione para que hagas algo para lo que ninguno de los dos está preparado. Si tu pareja no está lista, espera. Si no está listo, explíquele a su pareja por qué necesita más tiempo. No invitará más que problemas si se apresura a casarse.
El matrimonio es un gran problema y algo que se debe discutir a fondo. No hay una forma real de abordar estas preguntas sin incurrir en uno o dos momentos incómodos. Sin embargo, es importante que hables sobre el matrimonio y te ciñas a tu lista de preguntas y las contestes todas antes de caminar por el altar.